En unas horas, a las 12 del mediodía de este 26 de septiembre, el lanzamiento de la ‘bomba’ anunciará el comienzo de la mejor semana del año. Durante 7 días, los arnedanos vestiremos con los colores de la fiesta, y el pañuelo rojo volverá a anudarse en nuestro cuello como un lazo invisible que nos une a todos.
Las calles de la ciudad se teñirán de blanco, rojo y verde. La música en directo llenará cada rincón, las risas de pequeños, jóvenes y mayores se mezclarán con el sonido de las charangas, y el olor de nuestra gastronomía nos invitará a sentarnos juntos para compartir mesa, palabras e historias. Esta semana son días de reencuentros, de ahondar en nuestras raíces que laten hoy con más fuerza y de disfrutar de las tradiciones que pasan de generación en generación.
Nuestras fiestas son de todos. De los más pequeños, que esperan con ilusión la llegada de Gorgorito; de quienes vibran con cada golpe a la pelota en el frontón; de quienes madrugan para ver o correr los encierros y de quienes se emocionan en el Arnedo Arena con los novilleros que se disputan el codiciado Zapato de Oro, que este año celebra su 50 aniversario. También son de los jóvenes que disfrutamos de cenas y comidas en cuadrilla; y de nuestros mayores, que guardan en su memoria historias que nos enseñan el verdadero valor de lo que significa celebrar juntos. Todos tenemos cabida en nuestras fiestas y todos somos parte de ellas.
Estas fiestas también son de quienes nos visitan. Arnedo es una ciudad única, porque si algo sabemos los arnedanos es abrir los brazos a todo aquel que nos visita. Como dice el himno de la Peña Lubumbas: aquí no hay forasteros. Quizá, por eso, tampoco faltan a su cita nuestros vecinos los navarros de Andosilla, que cada madrugada del 27 de septiembre llegan dispuestos a robarnos a nuestros Santos. Y, aun así, pese a todo, les recibimos. Los arnedanos tendremos que esforzarnos un año más para que esto no ocurra. Tenemos la misión de preservar nuestra historia, y devolveremos a nuestros queridos Cosme y Damián a su altar, para que, bajo su mirada, sigamos disfrutando de las fiestas.
Gracias un año más a las peñas Tao, Lubumbas y La Chispa, al Club Taurino, a la Asociación Toro en la Calle y a tantas asociaciones que ponen su esfuerzo y pasión para mantener vivo el espíritu de estos días, en los que también sentimos cerca a quienes ya no están con nosotros. Su recuerdo nos acompaña en cada brindis.
Por todo ello, en nombre del Partido Popular de Arnedo, os deseo unas felices fiestas de San Cosme y San Damián. Que estos días sean de alegría, porque cuando el pañuelo se anuda al cuello, la ciudad vibra unida. ¡Viva Arnedo!
Jesús Rubio
Presidente de la Junta Local del PP de Arnedo